Entonces
me dices que
te espere frente a la iglesia
que vaya, aunque la lluvia
lo detenga todo
Que vaya
que me esperas.
Y yo sorteando
caminos anegados
con esta lluvia
a destiempo.
Y se refleja
la luna
entre tanto
llanto del cielo
y me abruma
el frio
y te imagino
tibia como
una hostia
y en paz dentro del auto
esperando
mis labios calientes
como una oración …
Con esos muslos que
son dos torres
hacia el cielo,
pero tientan al infierno
y me doy prisa
con ese recuerdo,
Y llego al sitio
para
bebernos un café
sobre la risa inocente
del reencuentro
y sacas
un cigarrillo electrónico
y te crees La Monroe
Y yo
empapado de ti
y
de tanta lluvia
y tu,
empapada de mi
y de tanto amarte,
en el asiento de atrás
de tu BM.