Cuando lo eras todo
y no me queda nada,
ni tus pasos alados,
la ternura apagada,
ni tu risa de océano,
ni la luz en miradas,
como cuando llegas
a la orilla esperada.
Cuando me eras grandeza
una flor perfumada…
Y me eras fuego enorme,
fogata inacabada …
Cuando lo eras todo
y eras alimento,
pan caliente en trozos
y pedazos de viento.
Lo eras todo,Todo,
todo lo que pienso.
Eras tierra y fruto
y célula y sustento.
Presencia en piel hermosa
de seda y firmamento,
cuando me eras latido,
letra y pensamiento,
vocablo necesario,
rima por momentos.
Savia recurrente,
fruto y lo que siento.
De repente,
solo hay pedacitos
de nada.
Porque el arco iris
se quebró cuando llegaste al cielo
y solo quedo el purpura,
el blanco junto al negro.
Luto maldito
que destroza el alma.
Pedacitos de nada,
burbujas que titilan en los ojos
flotando apagadas
y un cansado desdén,
sin tus huellas,
y un caminar infortuito.
Nada, nada, nada.
pedazos de silencio,
trozos de átomos.
Esencia de ti que se esfuma
en la bocanada de un cigarrillo.
Origen: La nada en pedazos