Acábame esta lluvia de mis ojos

mujersola

Un día fui a ese sitio
donde estas, aparte,
en aquel lugar tranquilo
ni quise mirarte.

Hay un cielo gris,
de tempestades
y un afán infinito
de adorarte, madre!!

Hay tambien
un cielo gris
sin nubes y sin soles
absurda sensación
que  llena mis temores.

Vengo madre
a hacerte honores
a pesar de la desdicha
en mis albores.

Hoy estoy
en ese sitio
y no quiero mirarte
mis ojos lloran
tu ausencia
y no puedo hallarte!

Hay un afán de palomas
y sus vuelos,
hay arrebato
de mariposas
en ceniceros…

Inevitable ocasion
para el recuerdo
cuando la tarde
me llena de ti
y tus misterios.

Y me ocupa el dia
en el reclamo
de tu presencia
y hay fragancia
de flores rojas,
aromas de tu esencia.

Aprendo
a vivir la vida
con tu ausencia
las nubes fingen
una lluvia triste
sobre mi demencia

Y llegan otros seres
a bregar la tierra
con ríos en los ojos,
anti presencias.

Despiden
para siempre
la vivencia
de algunos
de sus seres que
se ausentan.

Aquel jardin
resume el silencio que sentencia,
que nunca acabaran las horas tristes
por la ausencia,
porque siempre la partida es la sentencia
que aniquila en estas horas de impaciencia.

Recordé,
muy tiernamente,
cuando me abrazabas
y
vine al camposanto
donde estabas,
en búsqueda vital de tu mirada.

Acabame esta lluvia
de mis ojos,
arrasa con tu aroma
mis despojos.

Carlos Banks

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