Reptiles y silencios

Carlos Banks

Asesiné a Cupido. entonces el destino en un segundo se lleno de ti. Fue el dia que pude anular a mi albedrio. Con hacha en mano derribe el Eden, Converti la tierra en un cementerio. Tome el tren hacia marte. Querian que me quedara esa noche, pero me sentia infalible. Universal, permanente. Abandoné al universo con las alas del infante. Conquisté territorios, afilé el verbo y agaché la mirada. Enterré miles de versos sobre el fastidio del amor, su banalidad y los instintos. Esas paginas brotaron como arboles. Repoblé la galaxia. Ya no tenia miedo.. A mis espaldas escuchaba esa respiracion, dividida entre tu y mil mares, corta, repetida. Constante. El infinito no podia quedarse quieto. Habian lejanas ciudades que no conocia, como no conocia tus ojos, ni tu risa ni tu arma. Estoy cansado. Mi vida ya no era un regreso ni un quedarme. Solo este sueño de autoayudarme…

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